Región de Valparaíso podría tener un nuevo Santuario de la Naturaleza
Noticias / Valparaíso / Algarrobo / Septiembre 2015
La localidad de Algarrobo, tan visitada por turistas gracias a sus bellas playas y actividades dieciocheras, tiene mucho más que ofrecer y así lo estiman las autoridades municipalidades junto a los profesionales de la Fundación Kennedy. El pasado viernes 11 de septiembre ambas entidades anunciaron en conjunto que están trabajando por la protección del sistema de humedales El membrillo, que comprende el estero del mismo nombre y El Yugo, sus respectivas quebradas y la albufera ubicada entre los Condominios San Alfonso del Mar y Bahía de Rosas.
“Buscamos proteger oficialmente nuestro patrimonio natural, uno de los más valiosos en términos de biodiversidad y que representa un gran atractivo turístico, pues es uno de los pocos ecosistemas similares que van quedando en la playa de Algarrobo norte”, señala Marcelo Inostroza, encargado del Departamento de Medio Ambiente de la Municipalidad de Algarrobo. En efecto, la riqueza del sector es tal, que los censos preliminares arrojan que en el sector habitan 92 especies de aves, 4 tipos de anfibios, 5 de reptiles y una variada flora nativa que supera el centenar de especies.
Con el fin de recopilar los antecedes necesarios para la solicitud de declaratoria de Santuario de la Naturaleza, las entidades propulsoras reunieron a una veintena de expertos de las áreas de la biología, ornitología, botánica y manejo ambiental, entre otros. La jornada realizada el sábado 12 de septiembre comenzó con un conteo de aves para estimar la abundancia y diversidad de especies presentes en el humedal y continuó con una expedición en el sector de La Cascada.
“Al declarar esta área Santuario de la Naturaleza se protege el último reducto de dunas costeras del centro Algarrobo, lugar de nidificación y descanso de aves playeras y migratorias; además del sector de la quebrada El Membrillo cuyo valor para la flora nativa es inmenso, pues existen ejemplares de palma chilena (Jubaea chilensis) y arrayán de hoja roja (Myrceugenia rufa), especie endémica restringida a áreas costeras”, agrega Francisca Bardi Álvarez, Ingeniera Ambiental de la Fundación Kennedy.
“La parte más complicada de la declaratoria reside en todo lo relacionado con la propiedad privada pues, aunque la ley no exige la anuencia de los dueños del predio y/o del terreno colindante, la práctica así lo aconseja”, agrega Arquímedes Cecconi Correa, coordinador de la fundación propulsora naturalista y uno de los asesores legales de la iniciativa.
Fuente: El Martutino - septiembre 2015